Han pasado ya 4 años desde las últimas elecciones municipales y, nuevamente, estamos llamados a decidir quién nos representa a través del voto. Ya hace 4 años que Roque de Gando denunció la falta de liderazgo del actual gobierno y decidimos hacer lo que mejor sabemos: el municipalismo. El municipalismo no tiene colores, ni posiciones en el rango izquierda-centro-derecha, el municipalismo se caracteriza por escuchar. Acudir cuando el habitante nos reclame para escucharle e intentar encontrar una solución, es nuestro objetivo. No es fácil, no siempre hay una solución a todos los problemas, pero lo que sí existe siempre en Roque de Gando es la ilusión por intentarlo. Por ello, la ilusión abandera nuestro proyecto bajo el lema Ilusión por Telde. Con esta ilusión hemos caminado todos los distritos y barrios en estos 4 años, para ir allí donde el residente nos llamaba para escucharle o donde había algo que denunciar por la falta de gestión del actual gobierno, sitiaciones que, de otro modo, quedarían en el olvido. Nuestras suelas de zapatos desgastadas son nuestro orgullo, en ellas está la ilusión de este proyecto. Solo con esta ilusión podríamos liderar un proceso en Telde, para Roque de Gando, el liderazgo es escuchar y dialogar para encontrar soluciones a través de una gestión activa. Tenemos un programa que recoge los principales planes de actuación para vertebrar la ciudad desde la participación social, económica y política. No me extenderé ahora en ello, está en las redes, ahora solo me queda pedirles ilusión por Telde, y por eso, pido su voto, para que Roque de Gando cumpla su objetivo, que no es otro, que construir un Telde mejor que devuelva la ilusión al municipio.